Cuando una persona decide someterse a una liposucción o a una abdominoplastia, suele hacerlo motivada por un deseo de transformación física que va más allá de lo estético. Recuperar la confianza, sentirse cómodo con el propio cuerpo o cerrar una etapa tras una pérdida de peso son razones frecuentes que nos comparten muchos de nuestros pacientes. Y aunque los resultados pueden ser espectaculares, es importante tener una visión realista del proceso: desde lo que ocurre en quirófano hasta lo que sucede semanas después.
Liposucción VS abdominoplastia
La liposucción es una técnica quirúrgica que elimina depósitos de grasa localizada que no responden ni a dieta ni a ejercicio. No es un método para perder peso, sino una forma de esculpir zonas específicas como abdomen, flancos, muslos o brazos. La abdominoplastia, por su parte, está indicada cuando además de grasa hay un exceso de piel o flacidez abdominal, especialmente tras embarazos o pérdidas de peso importantes. En este procedimiento se elimina la piel sobrante y, si es necesario, se reparan los músculos abdominales.
¿Qué esperar tras la intervención?
Tras cualquiera de estas intervenciones es normal experimentar inflamación, hematomas y una sensación de tirantez. Durante los primeros días, el cuerpo está en plena fase de adaptación y recuperación, por lo que es fundamental seguir las indicaciones médicas al detalle. El uso de fajas postoperatorias, el reposo relativo y los masajes de drenaje linfático son elementos clave en esta etapa. Aunque la mejoría suele percibirse de forma progresiva, los resultados definitivos pueden apreciarse pasados unos tres a seis meses, cuando la inflamación ha cedido por completo y los tejidos se han reacomodado.
Resultados de una liposucción o una abdominoplastia
En cuanto al resultado estético, los cambios suelen ser muy visibles. La silueta se define, el abdomen se aplana y el contorno corporal mejora notablemente. Sin embargo, cada caso es único y factores como el tipo de piel, la edad, el estilo de vida y el peso previo influyen en el resultado final. Además, para mantener los efectos a largo plazo es fundamental adoptar hábitos saludables, incluyendo una alimentación equilibrada y actividad física regular.
En Clínica ICA acompañamos a nuestros pacientes durante todo el proceso, desde la primera valoración hasta el seguimiento postoperatorio. Nuestro objetivo no es solo conseguir un buen resultado estético, sino garantizar una recuperación segura, con expectativas claras y apoyo constante. Si estás valorando una liposucción o abdominoplastia, te invitamos a venir a conocernos. Una valoración personalizada puede ayudarte a resolver dudas y tomar decisiones con información y confianza.